Autor: admin | 12/01/2017
Volkswagen admitió oficialmente su culpabilidad en el fraude de los motores diésel manipulados y aceptó pagar una multa de 4 mil 300 millones de dólares a Estados Unidos para cerrar definitivamente el escándalo. Además, las autoridades estadounidenses imputaron a seis ejecutivos y empleados de Volkswagen “por su papel en la conspiración que duró casi 10 años”, afirmó el Departamento de Justicia de EU en un comunicado dado a conocer poco después de que la fiscal general, Loretta Lynch, anunciara el acuerdo con la empresa alemana.
“Los intentos de Volkswagen para esquivar los estándares de emisiones e importar vehículos falsamente certificados en el país representa una atroz violación de nuestras leyes medioambientales, protección al consumidor y financieras”, declaró Lynch.
Según el acuerdo, Volkswagen pagará 2 mil 800 millones de dólares como “multa penal por la conspiración de largo plazo para vender aproximadamente 590 mil vehículos diésel en EU utilizando un ingenio para trucar las pruebas de emisiones ordenadas por la Agencia de Protección Ambiental (EPA)” y las autoridades de California.
Además, la firma pagará mil 500 millones de dólares por la importación y venta en EU de vehículos manipulados, así como por fraude aduanero.
El consejero delegado del Grupo VW, Matthias Müller, afirmó en un comunicado que “Volkswagen lamenta profundamente el comportamiento que dio lugar a la crisis del diésel. Seguiremos avanzando cambios a nuestra forma de pensar y trabajar”. ”Los acuerdos que hemos alcanzado con el Gobierno estadounidense reflejan nuestra determinación para responder a la mala conducta que contradijo todos los valores que Volkswagen mantiene. Son un importante paso hacia delante para nuestra compañía y para todos nuestros empleados”, añadió Müller. El comunicado de VW no hizo ninguna referencia a los seis ejecutivos y empleados que las autoridades judiciales han imputado.