Autor: admin | 24/06/2016
Con un altísimo desempeño en cuanto a prestaciones mecánicas refiere, pero bajo en términos comerciales, el bólido americano se despide con una última y exclusiva edición, disponible en cuatro variantes
Por Eduardo Jiménez
Uno de los autos más emblemáticos y potentes en el mundo de los deportivos, llega a su etapa de jubilación y no por un mal desempeño en las pistas, pues ha sido uno de los deportivos pura sangre más capaces en la historia automotriz, sino por el hecho de que su existencia en el piso de ventas es muy costoso para el grupo FCA.
El Viper siempre se ha fabricado de manera prácticamente artesanal en un taller especializado en Detroit y desde la primer unidad lanzada al mercado, se ha caracterizado por atributos muy bien especificados: enormes motorizaciones, jamás menores a ocho litros en su cilindrada; tracción trasera, transmisión manual, electrónica, sólo la necesaria hasta la última edición y un diseño que, prácticamente se mantuvo intacto desde su concepción.
Para cerrar su ciclo de vida, se ha lanzado esta última edición denominada MY2017, en la cual encontramos cuatro variantes entre las que están: Viper GTS-R, que conmemoraba al GTS-R GT2 Championship Edition y que en su momento, solo se produjeron cinco unidades, su carrocería estará pintada en blanco con franjas azules. Viper Voodoo II Edition ACR, esta variante, fue limitada a solo 30 unidades en su lanzamiento y la principal característica es su trabajo de pintura en color negro con vivos en grafito e interiores con detalles en color plateado. Viper Snakeskin Edition ACR, lanzado en 2010 y el cual presumía un trabajo de pintura en color verde con dos franjas negras al centro de la carrocería. Por último, está el ACR que en su apogeo, logró récords en circuitos como Laguna Seca o el mismo infierno verde, Nurburgring, su carrocería permanece en color negro con un distintivo rojo en cofre y detalles similares al interior.
Cada unidad será fabricada prácticamente a pedido y contará con una placa especial donde, entre otros datos también portará el nombre del propietario. Su precio no se ha develado, ni su posible disponibilidad en el mercado mexicano, sin embargo nada se descarta. Lo que es un hecho, es que extrañaremos a este pura sangre, un auto al que pocos, muy pocos pudieron conducir pero muchos, escucharon de el.