Autor: Roberto Pérez S. | 11/08/2020
El mercado interno se encuentra aún muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia de COVID-19 con 2,563 unidades al mayoreo. “El bienestar y la reactivación en México se mueven en vehículos pesados”: Miguel Elizalde
La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), con base en la información publicada por el INEGI en el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Pesados y las cifras de venta compartidas por sus asociados, dio a conocer que en julio, siendo el primer mes en que México exporta con las nuevas reglas del T-MEC, se exportaron un total de 10,019 unidades, lo que significó un incremento del 0.4%, con relación a las 9,983 unidades del mes pasado. Sin embargo, en las cifras de exportación acumuladas se muestra una disminución de 42.6% a comparación al mismo período de 2019 cuando se exportaron 102,759 unidades. Recordemos que 2019 fue año histórico en exportación.
A cinco meses del inicio de la pandemia de COVID-19 en territorio mexicano, ANPACT dio a conocer que, durante el pasado mes de julio, la venta al mayoreo de vehículos pesados alcanzó un total de 2,563 unidades cifra que comparada con las 1,971 registradas en junio de 2020, representa un incremento del 30.0%. Finalmente, durante los primeros siete meses del año, las ventas al mayoreo sumaron un total de 11,874 vehículos, 56.3% por ciento menos si se compara con las 27,170 unidades comercializados durante 2019.
Al respecto Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de ANPACT dijo que “el mercado interno se encuentra aún muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia de COVID-19, en 2019 el promedio mensual de ventas al mayoreo era de 3,324 unidades mensuales, es decir estamos todavía 30% abajo, en el marco de una crisis más profunda que la del 2009”.
De acuerdo con la Estadística Básica de SCT 2019, México tiene 800,000 vehículos motrices con placas federales circulando en sus calles y carreteras con un promedio de 18 años de antigüedad. “Si México lograra su potencial productor, sería posible simultáneamente disminuir a la mitad la edad de la flota, bajar a menos de la mitad las emisiones y generar el doble de empleos,” dijo Elizalde.
“Renovar la flota tiene un efecto multiplicador sobre el bienestar social, ya que el autotransporte atiende todos los sectores y prácticamente todos los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de forma transversal,” continuó.
“Un vehículo pesado nuevo reduce gastos, aumenta seguridad vial y minimiza emisiones. El bienestar y la reactivación en México se mueven en vehículos pesados, por eso es indispensable implementar medidas que se vean reflejadas en el presupuesto de la federación de 2021 para que la reactivación no se quede sólo en buenas intenciones,” finalizó el portavoz empresarial.