Autor: Roberto Pérez S. | 18/06/2020
La iniciativa Marcopolo Biosafe and Valeo posee acción anti microbiana que mejora la calidad del aire que circula dentro de los autobuses.
Centrado en el desarrollo inmediato de soluciones que proporcionen, al mismo tiempo, la movilidad de las personas junto a la preservación de la salud y la seguridad de los usuarios del transporte público, y promuevan la retomada de este importante segmento, fuertemente afectado por la pandemia de Covid-19, Marcopolo, en sociedad con Valeo Thermal Bus Systems, desarrolló un sistema de aire acondicionado con luz ultravioleta para autobuses que posee acción antimicrobiana que ayuda a la desinfección y a la calidad del aire que circula en los vehículos de la marca.
La nueva solución de Marcopolo BioSafe posee un dispositivo de luz ultravioleta integrado con el sistema de circulación de aire convencional del equipo, que puede promover la bioseguridad en el transporte público, teniendo en cuenta la pandemia de Covid-19.La radiación UV-C emitida, debido a su potencia y acción antimicrobiana, promueve la desinfección del aire y las superficies del dispositivo, siendo eficaz en la inactivación del material genético de los virus y las células bacterianas esporuladas, que tienen una mayor resistencia innata en relación con diversos agentes infecciosos virales envueltos, algunos más resistentes que el Nuevo Coronavirus. La prueba realizada por el Laboratorio de Microbiología Clínica de la Universidad de Caxias do Sul, y que contó con la colaboración de la UFSM – Universidad Federal de Santa María en las actividades de medición de la potencia de las lámparas, evaluó la eficacia antimicrobiana de la radiación ultravioleta instalada en el aire acondicionado del autobús. Según el resultado, la tasa de eficiencia alcanzó más del 99%.
Según Luciano Resner, director de ingeniería de Marcopolo, la radiación UV-C generada por lámparas y mejorada por el flujo de aire del aire acondicionado, desinfecta el aire y las superficies.”Incluso considerando el bajo poder de penetración de la luz UV-C, su acción tiene aplicación en la destrucción de microorganismos suspendidos en el aire y la inactivación de parte de ellos en superficies y objetos. El mantenimiento de la efectividad de la radiación también está directamente relacionado con las condiciones ambientales, el grado de suciedad, la materia orgánica e inorgánica y la desinfección del interior del autobús”, explica agregando que no hay una exposición directa de los pasajeros a la luz. El ejecutivo también afirma que con la combinación de la tasa de renovación de aire del equipo de aire acondicionado, junto al uso de radiación UV-C en el sistema y la adopción de todas las precauciones de limpieza, la probabilidad de que el virus circule en el autobús es prácticamente cero.
El nuevo sistema de aire acondicionado con luz UV-C, cuyas lámparas tienen una vida útil de aproximadamente 8.000 horas, se venderá como opción con instrucciones de instalación en el módulo de aire acondicionado. El equipo estará disponible para los clientes en los mercados brasileño e internacional, tanto para los autobuses nuevos como para los vehículos en funcionamiento, y se deberá consultar la disponibilidad para cada modelo específico.
Ambiente limpio y seguro
“Es importante señalar que un análisis preliminar de la calidad microbiológica del aire en el interior del autobús con el aire acondicionado encendido mostró condiciones de aire óptimas (valor entre 15 UFC en la parte trasera y 164 UFC/45 minutos en la parte cercana a la puerta de acceso).Este resultado, si se identifica en un entorno crítico, como los servicios de salud, sería comparable a los límites clasificados como óptimos para enfermerías (0 a 450UFC/dm2/h)”, destaca Resner. Valores muy por debajo de los límites estipulados para Brasil por ANVISA – Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, que determina que el estándar de referencia para la calidad del aire interior en ambientes con aire acondicionado para uso público y colectivo, no debe exceder el valor máximo de 750 UFC / m³ (unidades formadoras de colonias por metro cúbico) de hongos para la contaminación microbiológica.
Como referencia, para los ambientes considerados especiales o críticos, como los servicios de salud, los límites máximos de UFC (unidades formadoras de colonias) se estandarizaron por muestreo pasivo y no activo. Estos límites se han clasificado como óptimo, aceptables e inaceptables de acuerdo con la siguiente tabla.