Autor: Roberto Pérez S. | 10/10/2019
Los robots colaborativos (cobots) trabajan junto con los ingenieros de Ford para aplicar los toques finales a los vehículos Fiesta en la línea de producción.
Ford ha implantado por primera vez un equipo de robots colaborativos (cobots), que trabajan junto a ingenieros en Colonia (Alemania) para asegurar que cada Ford Fiesta tenga un acabado perfecto. Los seis cobots completan una secuencia coreografiada para lijar toda la superficie del chasis en solo 35 segundos. La iniciativa no sustituye a los empleados, sino que permite a los operadores utilizar su tiempo en tareas más complejas y evitar que sufran el estrés asociado a la realización de tareas repetitivas.
“Los cobots pueden notar cuándo se necesita aplicar más fuerza, igual que nosotros, y pueden llegar más fácilmente a lugares de difícil acceso, como el centro del techo”, afirma Dennis Kuhn, ingeniero jefe de fabricación de Paint Shop, Ford Europa.
Cada cobot es un UR10, el cobot más vendido del mundo, de Universal Robots, el mismo tipo que se utiliza también en la industria de equipos de audio para pulir altavoces y subwoofers de alto rendimiento. En la planta de pintura de Ford, incorporan una capa flexible y suave impresa en 3D entre el brazo robótico y el papel de lija que permite que el cobot trabaje con la misma precisión y destreza que una mano humana.
Durante el proceso de producción, cada unidad de Ford Fiesta se sumerge en un baño especial para proporcionar más de diez años de protección contra la corrosión. Después, pueden quedar pequeñas manchas en la superficie, que no se ven a simple vista, pero sí se pueden notar al tacto y que pueden afectar al acabado final del vehículo. Los seis cobots intervienen para suavizar estas inconsistencias y aspirar el polvo que queda. Dos empleados realizan las comprobaciones finales antes de que el chasis del vehículo se mueva a lo largo de la línea para aplicar la imprimación.
Para la fabricación de altavoces y equipos de audio con superficies en su mayoría planas, sólo se necesita un cobot. La implantación de esta tecnología en una línea de producción en movimiento para un vehículo con múltiples contornos requería un nuevo enfoque.
“Tardamos varias semanas en instalar los cobots y programarlos para que se movieran en armonía para suavizar los contornos únicos de un Ford Fiesta, una tarea que resultaba aún más difícil porque el vehículo nunca deja de moverse”, asegura Detlev Dahl, CEO de Dahl Automation. “Pero ahí es donde la adaptabilidad de los cobots y nuestra vasta experiencia como uno de los primeros integradores de sistemas certificados de Universal Robots salieron a la luz. Con los movimientos definidos, nunca pierden el ritmo.”
Ford está estudiando ampliar el uso de cobots en las instalaciones de la compañía en Valencia, y Craiova (Rumania). La compañía ya ha introducido otros cobots que han sido programados para ayudar a los trabajadores de la línea de producción con procedimientos de ensamblaje complejos, como la instalación de amortiguadores en los coches y bujías de encendido en los motores; y también está utilizando un robot de conducción autónoma llamado “Survival”.