Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 02/08/2019
Siempre ha sido una tentación política y para “beneficiar al pueblo sabio” hacer programas de legalización de vehículos extranjeros, importados de Estados Uniodos. En todos los ensayos los resultados han sido negativos y de alto impacto para la industria terminal, debido a que erosiona la venta de veículos nuevos. Hoy, las luces amarillas se vuelven a encender luego de que existe una posibilidad muy firme de que el presidente Andrés Manuel López Obrador inicie un programa de legalización masiva y a nivel nacional.
Guillermo Rosales, director general de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores señaló: “Tan sólo la última gran regularización de este tipo de vehículos, ejecutada por el presidente Vicente Fox, provocó un descenso en ventas de hasta 30%”.
El director general adjunto de la AMDA insistió en que el mercado interno automotor lleva 25 meses de caídas consecutivas, que aunado a una regularización masiva de vehículos de contrabando, tendría un grave impacto en la operación, inversiones y empleos que brinda formalmente el sector distributivo de automotores.
Zárate comenta que las regularizaciones nunca han terminado con el problema, sino que simplemente es el inicio de un nuevo ciclo para seguir introduciendo basura automotriz en espera de una futura legalización.