Autor: admin | 18/06/2014
Fotos y texto: Roberto Pérez S.
Chevrolet revive un nombre más evocadores de cuantos hayan acompañado a este purasangre desde hace seis décadas –Stingray– para designar la séptima generación de su icono superdeportivo: El Corvette, el cual ha sido rediseñado desde cero para dotarlo de una carrocería elaborada en materiales ultra ligeros de una indómita belleza que llama la atención a gritos e impone respeto a su paso; un habitáculo de mayor calidad y corte deportivo dotado con lo último en tecnología e infoentretenimiento pero, en especial, de un estudiado tren motriz que le otorga unas prestaciones brutales que lo erigen no sólo como el Corvette más potente de la historia gracias a sus 460 Hp, sino también como el más rápido jamás producido, ya que requiere menos de 4 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h.
Esto nos ha quedado muy claro después de someter a nuestras pruebas al Chevrolet Corvette Stingray Coupé 2014 con paquete deportivo Z51 de alto desempeño, el cual, desde nuestro punto de vista, es sin duda el mejor superdeportivo en el mercado por su estupenda relación costo/beneficio, pues por su precio (990 mil pesos, el tercio de lo que cuesta un Ferrari, Porsche o Lamborghini) uno obtiene un auto de diseño espectacular, una cabina con ,lo último en tecnología y equipamiento y mucha, mucha potencia que se traduce al volante en un desempeño y prestaciones fuera de serie que rivalizan con cualquier superdeportivo, sin importar que tan ilustre sea su apellido.
LA LEYENDA CAMBIA DE PIEL
Stingray es un nombre que ya se utilizó en el pasado, primero con dos palabras por separado -Sting Ray en el modelo de 1963 a 1967- y posteriormente con una única palabra -Stingray, desde 1969 a 1976-. Este año, la firma norteamericana revive dicha denominación para bautizar al Corvette 2014.
La misión del equipo de diseño e ingeniería de Chevrolet consistió en crear una propuesta atrevida, que aprovechara las avanzadas tecnologías en construcción ligera y tren motriz y realzara sus prestaciones, aunque teniendo siempre muy presentes las señas de identidad de Corvette.
De esta manera, el nuevo Corvette Stingray 2014 (el cual se fabrica en exclusiva en la planta de Bowling Green de GM, en Kentucky) solo comparte dos componentes en común con el modelo anterior. Es más sofisticado y eficiente; posee una calidad nunca vista y presenta un renovado planeamiento mecánico que le otorga un mayor performance y un rendimiento nunca antes vistos.
Su esculpida y atlética carrocería de aluminio reemplaza al acero, mientras que las estructuras de fibra de carbono y nano-carbono reducen el peso hasta en 45 kilogramos y es 57% más rígida que el de su predecesor hecho de acero, lo que se traduce en una conducción más precisa y una respuesta sorprendente.
Las agresivas y seductoras formas de este auto no son solo un capricho, sino que obedecen también a logar un reducido coeficiente aerodinámico y un comportamiento más neutro y excitante. Un incremento en el área de contacto mantiene el vehículo firme, mientras que los deflectores exteriores crean un flujo de aire que reduce levantamiento y minimiza el arrastre. Su avanzado sistema de ventilación envía el aire a puntos específicos para enfriar los componentes esenciales del motor, la transmisión y los frenos. A su vez este flujo de aire controla la temperatura de operación mejorando así la conducción y el desempeño. Un impresionante diseño pensado para las carreras.
Stingray no tiene respirador inferior, sino un sistema de extracción que direcciona el aire de la parrilla hacia el radiador y lo expulsa por el compartimento del motor. Cada una de sus aspas esta precisamente angulada generar un flujo de aire optimo. De ésta manera se logra reducir el levantamiento frontal, la fuerza de contacto, mejorando así la conducción especialmente en altas velocidades.
Diseñado estética y proporcionalmente, cada milímetro del Corvette 2014 fue creado con un fin. Sus formas geométricas se transforman naturalmente de suaves curvas a afilados bordes rematados por elementos de gran contraste que invitan a acariciar su carrocería y le confieren una belleza incuestionable.
El frontal destaca por el bajo y agresivo cofre de fibra de carbono, coronado el extractor de aire, una enorme toma de refrigeración y los hermosos faros HID de xenón para alta y baja intensidad, los cuales están enmarcados por direccionales LED color mbar que se prenden a los bordes , y un armazón cromado color negro.
Las colosales formas de la parte posterior se ven rematas por calaveras de cuatro elementos que tienen un nuevo aspecto angular, y que recaen elegantemente en vidrio moldeado de aspecto tridimensional.
MAYOR CALIDAD EQUIPAMIENTO Y TECNOLOGÍA
Al igual que en el exterior, la cabina ha sido remodelada por completo, apostando no solo por un diseño mas vanguardista y ergonómico, sino también a materiales de mayor calidad e impecables acabados que, junto con su basto equipamiento y tecnología, hacen que cada recorrido sea todo un placer para los sentidos.
Todas las prestaciones y detalles del interior están pensados para conectar el conductor con el Corvette, desde la cabina envolvente, inspirada en los cazas de combate, hasta la atractiva instrumentación conformada por displays digitales que simulan los clásicos relojes de aguja. A estos se añade la información proyectada en la base del parabrisas (conocida como Head-Up-Display), muy evolucionada sobre la vista en anteriores Corvette, y otra pantalla tácil sobre el tablero desde la que manejar el audio o la navegación, entre otros.
El conductor es el gran protagonista incluso en los detalles más pequeños como el volante de diámetro reducido, para una experiencia de conducción más intensa, o la apuesta por el magnesio en lugar del acero para la estructura de baquets deportivos, por su reducido peso, su mayor resistencia y su gran rigidez, características ideales para disfrutar al máximo de la conducción.
Innovadoramente iluminada por elementos digitales y controles inteligentes, la cabina de Stingray es un deleite para la vista. El panel de instrumentos incluye una pantalla de 8” de alta definición con calibradores reconfigurables despliegue de información de las condiciones de manejo, operación y desempeño en tiempo real. La consola central cuenta con una pantalla táctil retractable con aplicaciones personalizables.
Una fina y constante línea de diseño se extiende desde el tablero, llegando impecablemente al borde de la puerta y la consola. Cada centímetro avanza por los materiales auténticos de los que está hecho: aluminio, fibra de carbono y piel de primera clase seleccionada y trabajada a mano, que en conjunto crean una atmósfera de gran lujo y deportividad.
Diseñado exclusivamente para Corvette Stingray y forrado a mano con piel o gamuzina, este volante es más pequeño, diseñado especialmente para competencia, cuenta con una de las mejores paletas de cambios que se han visto en vehículos de carreras. Sus costuras planas son discretas y le dan un toque reservado pero artesanal. Las palancas en el volante permiten accionar los cambios de velocidades de la transmisión automática.
Para mimar a sus ocupantes, el Corvette cuenta con un exclusivo Sistema de infoentretenimiento Chevrolet MyLink de tercera generación con pantalla táctil a color de 8″, Bluetooth para transmitir audio, sistema de manos libres, sistema de audio Bose con AM/FM, MP3 y RDS y sistema se navegación. Además, una ranura USB en la consola central, una entrada de audio independiente y una ranura para tarjetas SD abren todo un abanico de posibilidades de conectividad.
Entre el equipamiento de serie, además de los rines de 19” al frente y de 20” atrás, contábamos con un techo traslúcido, el cual es removible y se almacena en la cajuela de 425 litros.A
AL VOLANTE
El Chevrolet Corvette C7 ha evolucionado en todos los sentido, y su comportamiento, desempeño y prestaciones no son la excepción, pues basta con recorrer unos cuantos kilómetros al volante del auto para caer en cuenta que no sólo hace gala ahora de una aceleración fulminante, sino también de una maniobrabilidad fuera de serie y, por más extraño que parezca, ofrece un confort de marcha más elevado.
Ya no es el auto brincón y de suspensión dura y áspera de antaño que transmitía todas las imperfecciones del camino al interior, en donde se apreciaba plásticos duros y en que crujía y sonaba todo, menos el radio. No lo cierto es que Chevrolet no ha escatimado en recursos para ofrecernos un deportivo de raza que, se mire por donde se mire, ofrece una calidad, lujo y manejo dignos de cualquier deportivo europeo.
El nuevo motor LT1 V8 Small Block de 6.2L incorpora las tecnologías más avanzadas para generar más potencia con menos combustible, tal es el caso del sistema de inyección directa, Tiempo de Apertura Variable de Válvulas (VVT) o el sistema Active Fuel Management que desactiva cuatro cilindros cuando se conduce a bajas velocidades y ofrece los 8 cilindros con tan solo pisar a fondo el acelerador.
Esta mecánica eroga 460 Hp a 6,000 rpm y un toque de 460 lb-pie a 4,200 rpm, que son enviadas alas ruedas traseras a través de una transmisión automática secuencial Hydra-Matic 6L8 de 6 velocidades con paletas de cambios en el volante. Los dos nuevos sistemas de escape activos permiten disfrutar de menos restricciones, más velocidad de reacción y unas sensaciones más depuradas en la autopista.
Al volante estas cifras se manifiestan en un manejo netamente deportivo y excitante, pues es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en menos de cuatro segundos y de alcanzar un agarre en las curvas superior a 1 G.
Gracias al empleo de aluminio, fibra de carbono, nano-carbono y magnesio en su carrocería y chasis se ha logrado un optimo reparto de peso de 50/50 entre ambos ejes, lo que repercute en un comportamiento mas neutro y una gran estabilidad.
La ubicación del eje trasero proporciona balance de peso perfecto del 50/50, mientras que sus sensores inteligentes anticipan los cambios de velocidad igualando las revoluciones del motor, ofreciendo así cambios de velocidad suaves -tanto a altas revoluciones, como a bajas-. Active Rev Matching mejora la experiencia de manejo emulando perfectos cambios de marcha con movimientos de punta-tacón, simplemente presionando un botón.
El Stingray ofrece tres modo de manejo con el simple girar de una perilla que permite ajustar hasta 12 parámetros, como el control electrónico de aceleración (ETC), el control magnético de conducción o el control de tracción inteligente (PTM), con cinco ajustes diferentes: Weather, Eco, Tour, Sport y Track.
Aunque el chasis exhibe un diseño parecido, con paralelogramo deformable y muelles de ballesta, el Corvette Stingray acopla muchas piezas de nuevo diseño en el tren de rodaje.
Este modelo incorpora uno de los sistemas de suspensión más rápida del mundo. Magnetic Selective Ride Control GEN 3 es un sistema de amortiguación en tiempo real, el cual, mediante sensores incorporados al vehículo, mide las condiciones de la pista aproximadamente cada 15 milisegundos, para ofrecer la mejor superficie de contacto con el pavimento. Todo cambia con tan solo apretar un botón. Cinco diferentes y seleccionables modos de conducción calibran electrónicamente hasta 12 variables de rendimiento para personalizar el desempeño de Corvette Stingray sin importar el camino o situación.
Acompañado de una ingeniería de precisión viene un manejo magistral. La dirección eléctrica elimina la vibración mejorando el grado de reacción. Los frenos de serie Brembo aumentando la fuerza de frenado, mientras que las llantas Michelin Pilot Super Sport Zero Pressure – exclusivas de Corvette Stingray 2014 – optimizan el agarre y el manejo. El paquete de equipamiento Z51 te permite alcanzar la capacidad máxima. El Diferencial Electrónico de Deslizamiento Limitado ofrece mejor estabilidad y control. También está disponible la tercera generación de tecnología Magnetic Selective Ride Control, la cual regula la suspensión para una conducción con mayor precisión. Traction Management ofrece siempre un máximo agarre y control en el camino.
NUESTRO VEREDICTO
Sin temor a equivocarnos, el Chevrolet Corvette Stingray 2014 es, pieza por pieza, la mejor opción de compra en el segmento de los deportivos de ensueño, pues toda la tecnología que engloba y su elevada ingeniería han sido aderezados por un diseño soberbio que roba suspiros y la admiración a su paso, así como una cabina de corte deportivo que nada tiene que enviarle por calidad, equipamiento e infoentretenimiento a un sedán de superlujo, pero con la gran ventaja de que su poderoso motor de 460 Hp lo convierten en un auténtico misil que devora en un tiempo y espacio inusitados rectas y curvas con el agarre de un felino.