Autor: admin | 12/04/2016
La adopción de autos eléctricos (EVs) como medio de transporte sustentable y amigable con el ambiente, es una tendencia creciente a nivel global.
Derivado de los cada vez más presentes cambios climáticos y la visión de una sociedad sustentable, cada vez más empresas y personas adquieren un vehículo cero emisiones, por lo que es necesario mejorar las capacidades y autonomía de éstos a través de las baterías.
Los conductores descubren en el día a día una gran ventaja en el bajo costo de conducción de un vehículo eléctrico. Nissan LEAF, el cual fue primeramente introducido en Estados Unidos y Japón, hoy está disponible en 47 mercados a nivel global, incluyendo México.
Desde las etapas tempranas de desarrollo, Nissan examinó el estilo de vida de las personas y se propuso construir un vehículo que satisficiera las necesidades reales de la vida diaria.
Nissan se convirtió en pionero en 1992 al aventurarse en el desarrollo de baterías de iones de litio.
“Anticipamos que estas baterías, debido a su alta densidad de energía, serían las mejores para impulsar automóviles. Nuestra investigación nos llevó a desarrollar una nueva estructura celular laminada, la cual tiene muchas ventajas; es relativamente barata, tiene una estructura simple con menos partes, es ligera y delgada, y puede fácilmente diseñarse para adaptarse a la forma del vehículo”, comentó Norihiko Hirata, director general adjunto del Grupo de Ingeniería de Sistema de Baterías de la división de Vehículos Eléctricos e Híbridos de Nissan.
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Las baterías de los EVs enfrentan una gran demanda de carga debido a la gran cantidad de energía que transfieren cuando están en uso y son recargadas. Esta es la razón por la cual la tecnología debe evolucionar constantemente para ofrecer seguridad y óptimo desempeño. Como resultado, Nissan ha sido capaz de ampliar la garantía de 100 mil km y hasta cinco años a 160 mil km y hasta ocho años.
Nissan ha identificado materiales con el potencial para mejorar el desempeño de las baterías de iones de litio y se encuentra investigando y desarrollando materiales que incrementan la capacidad, al mismo tiempo que reducen la resistencia interna, lo cual permitirá que se reduzcan los tiempos de recarga.
“Nuestra meta es alcanzar un rango de conducción de 600 km con una carga rápida –un desempeño que supere el rango de un típico vehículo compacto con un tanque de combustible. Ese es el punto en donde el desempeño de los EVs puede disparar un cambio dramático en el rol de los vehículos en la sociedad”, finalizó Hirata.