Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 09/01/2019
Todavía no toca fondo la industria automotriz. De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Geografía e Informática, que lleva Julio Santaella y publicadas por la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, que dirige Eduardo Solís y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, que preside Guillermo Prieto, al cierre del año 2018, las ventas cayeron 7.1%, agudizándose en diciembre cuando el frenón fue de dos dígitos, es decir 10.7% respecto al mismo mes del año pasado.
Así, al cierre del año, se vendieron durante 2018, 1 millón 421 mil 458 unidades y de acuerdo con los pronósticos para el 2019, se espera un desempeño similar. Es decir, se mantiene la tendencia negativa, incentivada por la incertidumbre económica y el natural proceso de cambio en el ámbito político. En el mejor de los casos, la recuperación vendría en el 2020.
Pero como sucede en un mercado abierto, ni todos son perdedores, ni todos ganadores. En el lado de los números rojos se colocan los grandes participantes, que una vez dominaron el mercado, como las firmas estadunidenses. Ford tuvo una caída de 15.8% y su participación de mercado se redujo a sólo 4.8%, su menor nivel en la historia en México.
Los tres grandes también se vinieron abajo. Nissan cedió el 14.4%, General Motors 8.7% y Volkswagen 16 por ciento. En cambio hubo ganadores, como Toyota, que repuntó 3.1% , y un caso excepcional fue Suzuki que creció el 37%. Kia continuó su ascenso de manera más moderada al crecer 8.7% y Mazda, 7.3%.