Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 26/04/2018
A pesar de que la industria automotriz en México está cayendo 11 por ciento en lo que va del año, Mazda, que dirige Miguel Barbeyto, salvó el trimestre al tener un incremento en ventas de 5%. El ir en contraflujo se debe a diferentes factores, el principal de ellos es la robustez de su portafolio, en especial de sus crossover CX-3 y CX-5, líderes en un segmento que raya en súper lujo.
En la fórmula no se puede dejar a un lado al Mazda2, un pequeño hatchback juvenil, considerado el de mejor equipamiento en su segmento.
Mazda se mantiene con sus 57 distribuidoras, más de 20 de ellas que están en plena renovación acorde a la nueva imagen mundial de la marca. “Por el momento es la cantidad exacta que permite dos cosas: buena atención al cliente y rentabilidad para nuestros socios distribuidores”, indicó Barbeyto.
El año pasado el crecimiento de Mazda se vio trabado por falta de producto, en especial del Mazda2, pero acaban de anunciar que se producirá en su planta de Salamanca, Guanajuato, el Mazda2 sedán, un vehículo que dará volumen en ventas y que se acompañará con la versión hatchback.
Mazda a nivel mundial, comenta Barbeyto, tiene una alianza con Toyota a nivel de manufactura y piensan que la competencia global las llevará a trabajar de manera conjunta en conectividad y nuevas opciones de movilidad, como son los autos eléctricos y autónomos.