Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 11/01/2018
Si nos fuéramos por la sola lógica de los precios petroleros el litro de gasolina debería costar cerca de 30 pesos y la razón es sencilla. Si hace dos años con los precios del barril de crudo en 22 dólares estaba el litro de gasolina magna en 14 pesos y actualmente el mismo barril de crudo se ubica en los 50 dólares el barril, por razón natural debiera estar mínimo en 30 pesos el litros, cuando su cotización actual promedio, ya con mercado abierto es de 16.70 pesos el litro.
Es aquí donde entra la economía y la política. La Secretaría de Hacienda otorga un estímulo fiscal de 2.33 pesos por litro de Magna durante la semana del 6 al 12 de enero, por lo que en realidad sólo se pagará el 50% del Impuesto Especial sobre la Producción y Servicios (IEPS) en este periodo.
El apoyo a la Premium se ubica en 1.22 pesos por litro, por lo que el impuesto disminuye 25%. El mayor monto lo tuvo el diésel con un estímulo de 3.07 pesos por litro, el más alto desde enero de 2016 cuando se comenzó a usar la nueva metodología para determinar el descuento al IEPS.
Los descuentos fiscales están entre los mayores otorgados por Hacienda, sólo por debajo de los observados en septiembre, cuando el impacto por el huracán Harvey en Estados Unidos dañó la capacidad de refinación de la zona de la Costa Este en ese país, impactando a su vez las importaciones de combustibles hacia México.
Con un mercado abierto las gasolineras pueden cobrar de manera libre por cada litro de gasolina. Sin embargo, la Secretaría de Hacienda aún puede incidir en los precios finales a través de los subsidios que establece cada semana.
Este sistema de control de precios a través del estímulo no ha evitado que los precios de la gasolina Magna en México se incrementaran 17.46% anual. El objetivo era trasladar al mercado los costos de importación, transporte y distribución de gasolinas, y evitar un mayor subsidio con costo al erario público. Si se quita ese primer efecto del alza, el incremento en 2017 apenas fue de 0.55%, según datos de la calculadora de inflación del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
