Autor: admin | 18/01/2017
Por Julio Brito A
Los demagogos tienen la virtud de repetir una mentira una y otra vez, de tal suerte que sus interlocutores terminan por creer que es verdad. El discurso de Donald Trump está salpicado de datos errados, lugares confundidos, datos a medias. El anuncio de las inversiones de la industria automotriz más parecen un regalo a Trump para complacerlo, pero con poca sustancia. Digamos que reaccionaron a la fuerza de la extorsión, porque es lo que en verdad está sucediendo.
Habido de resultados fulminantes Donald Trump paró la planta de San Luis Potosí de Ford, pero se reactivó y amplió la de Hermosillo. General Motors de México se mantiene intacta y le dan a Trump una producción de ejes para camionetas pick-up, que ellos no producen en México, pero dentro de tres años lo harán en Michigan, retirando a un proveedor y la última, Fiat-Chrysler, anuncian inversión en Estados Unidos para complacer a Trump y a cambio inician la producción de la nueva Compass en Toluca, Estado de México, donde se produce el Fiat 500, -Nafinsa apoyó a la armadora con 400 millones de dólares para que fuera producida en México.
El discurso de Trump llega a nivel de bullyng para México. Toda aquella empresa que anuncie alguna inversión será castigada. La pregunta es que si General Motors y demás marcas tienen inversión en ejecución, ¿podrán seguir exportando sus autos desde México? Se entiende que continuará operando las reglas actuales, porque salvo BMW, que se rebeló a Trump, las otras tomaron el discurso de que somos empresas globales, pero nuestra país de origen es Estados Unidos .
Otro de los errores de Trump es que habla de México como si fuera un país de similares características y potencia económica. Entre ambas naciones, por desgracia, hay una diferencia de 13 a uno. El virtual Presidente dice que México roba empleos y analicemos el caso BMW. Ellos tienen en Estados Unidos la planta de la marca alemana más grande de América y generan 70 mil empleos. En México, cuando se inaugure la planta de San Luis Potosí apenas llegará a 2 mil empleos. ¿Puede haber comparación?
Pero lo peor de todo es que México ha comprado en los últimos diez años las camionetas BMW que se producen en Estados Unidos y a cambio no se ha producido una sola en México para el mercado estadunidense. ¿En dónde está el robo de empleos?