Autor: admin | 17/11/2021
Segunda prueba para el Audi RS Q e-tron en el norte de África
Audi Sport ha avanzado un paso más hacia el Rally Dakar durante la segunda semana de noviembre: en una nueva prueba realizada en Marruecos, Carlos Sainz/Lucas Cruz, Mattias Ekström/Emil Bergkvist y Stéphane Peterhansel/Edouard Boulanger se turnaron al volante del Audi RS Q e-tron.
Pistas de alta velocidad, carreteras de grava, dunas, lechos de ríos secos: el innovador prototipo de Audi para el Rally Dakar ha pasado por las situaciones más complicadas durante su segunda prueba en Marruecos. En un plazo extremadamente justo de poco más de doce meses, el equipo ha desarrollado el RS Q e-tron hasta tal punto que ahora puede afrontar jornadas de prueba off-road diarias equivalentes a la duración de una etapa del Dakar.
En la carrera contra el tiempo y contra los cuellos de botella en el suministro de componentes individuales provocados por la pandemia, Audi Sport ha llevado a cabo un programa concentrado. Los tres equipos de pilotos hicieron rodar el prototipo con el número de chasis 103 más de 2,500 kilómetros por los terrenos más difíciles. Las pruebas incluyeron la imposición por parte de los ingenieros de temperaturas muy elevadas en el RS Q e-tron de forma artificial: Stéphane Peterhansel se encargó de probar el auto por el lecho de un río seco con las tomas de aire de refrigeración deliberadamente tapadas con cinta adhesiva para simular altas temperaturas exteriores, una prueba que el prototipo de propulsión eléctrica con convertidor de energía a bordo superó sin problemas. Sin embargo, esto no fue así durante todas las jornadas. Los daños sufridos por los neumáticos en las pistas rocosas obligaron al francés, al igual que a Mattias Ekström, a realizar repetidas interrupciones; y también hubo que sustituir una horquilla de la suspensión doblada por el impacto con una roca, un manguito del eje de transmisión con fugas y otros componentes, junto a pequeñas reparaciones en la carrocería