Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 24/10/2018
“Nacido en el circuito, fabricado para la carretera”. El modelo de producción llega meses después del debut mundial del R8 LMS GT3 en el Salón del Automóvil de París. Además de su diseño más deportivo, el Coupé y el Spyder cuentan con motores más potentes. La comercialización de los nuevos modelos en Europa se iniciará a principios de 2019. “El R8 ocupa una posición única para Audi en todos los aspectos”, declara Michael-Julius Renz, Director de Audi Sport GmbH.
“Ahora es aún más potente y rápido”, añade Oliver Hoffmann, Director Técnico de Audi Sport GmbH: “La competición es parte de nuestro ADN. Con alrededor del 50 por ciento de componentes compartidos con el R8 LMS GT3 y un 60 por ciento con el R8 LMS GT4, ningún otro auto está tan próximo a las carreras como el Audi R8”, declara Hoffmann. Con una respuesta instantánea, subida de revoluciones ultra-rápida y un sonido único, el corazón del Audi R8 es su motor V10 atmosférico, disponible en dos variantes de potencia. Se trata del motor V10 con tecnología idéntica a la que utilizan los R8 LMS GT3 y R8 LMS GT4 de competición. Un propulsor muy compacto, que se produce en la fábrica de motores en Györ, Hungría. Entre sus características, un radiador independiente para controlar la temperatura del aceite del motor, que se suministra desde un cárter seco.
Este principio de lubricación, procedente de las carreras, permite instalar el motor en una posición muy baja, lo que favorece a la hora de conseguir un bajo centro de gravedad. La bomba de aceite funciona en diferentes etapas, garantizando así la correcta lubricación en cualquier condición, incluso con las aceleraciones laterales de alrededor de 1.5 G que son posibles con el Audi R8. Ambos motores cuentan con un filtro de partículas de gasolina. Las modificaciones en la suspensión proveen aún más estabilidad y precisión. La asistencia ha sido reajustada tanto en la dirección dinámica opcional como en la servodirección electromecánica. La respuesta de la dirección, las transiciones entre los diferentes modos de conducción, el tacto al volante…
Todo es ahora más preciso a cualquier velocidad. Dependiendo del motor seleccionado, los tres programas adicionales, dry, wet y snow, se añaden al resto de modos del sistema de conducción dinámica Audi drive select, junto al modo performance. Estos programas adaptan parámetros fundamentales del comportamiento dinámico del auto en función del coeficiente de adherencia al pavimento. Gracias a la puesta a punto especial del control electrónico de estabilidad (ESC), la versión tope de gama frena de 100 km/h a cero en hasta 1.5 metros menos de distancia que antes; la distancia de detención de 200 a 0 km/h es hasta 5 metros menor, en cada caso dependiendo de las condiciones exteriores.
El nuevo Audi R8 está equipado de serie con rines de 19 pulgadas instaladas de fábrica. Los rines ultraligeros de 20 pulgadas con diseño de cinco radios en V y neumáticos deportivos, que proporcionan un comportamiento dinámico aún más preciso, están disponibles de forma opcional. Audi ofrece frenos con discos carbocerámicos como alternativa a los de serie, fabricados en acero. Opcionalmente, la barra estabilizadora delantera puede ser de polímero reforzado con fibra de carbono (CFRP) y aluminio, lo que reduce el peso en unos dos kilogramos.