Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 25/07/2018
*Esta columna se escribió horas antes de la muerte de Sergio Marchionne
La noticia de la intervención quirúrgica de Sergio Marchionne junto con el rápido nombramiento de su relevo Mike Manley no auguraron más que el fin de una época que permitió el nacimiento del grupo Fiat-Chrysler, en ese orden. Al final se supo que el alto ejecutivo sufrió una embolia mientras se sometía a una operación de sarcoma de hombro invasivo, con daño irreversible en su función cerebral.
Desde hace tiempo Marchionne, de 66 años está sumido en coma y se mantiene vivo sólo gracias a la asistencia de las máquinas. Los médicos dijeron que no había esperanzas de recuperación. Con tal diagnostico lo único por hacer era el nombramiento de Manley y mirar hacia el futuro del grupo, que no tiene muy claro su panorama global.
Marchionne en varias ocasiones pugnó por una fusión con General Motors, que siempre fue rechazada y hasta corporativos chinos pujaron por el grupo, que tiene marcas tan famosas como Fiat, Alfa Romeo, Jeep, Dodge, Chrysler y Ram ofrecieron; pero sin lugar a dudas, FCA está en mucho mejor posición que cuando Marchionne se hizo cargo de Chrysler en la crisis 2008-2010, tras una frustrada fusión con el grupo alemán Daimler.
Después de siete años de esfuerzos por consolidar la fusión y tras resultados financieros desastrosos Daimler decidió deshacerse de Chrysler y la vendió a precio de ganga a Cerberus Capital, que entendía de finanzas, pero no de manufactura automotriz, que se juntó con la gran crisis del 2008-2010 en una tormenta perfecta, donde no sólo Chrysler sino también General Motors estuvieron a punto de desaparecer y se declararon en quiebra.
Fiat con el liderazgo de Marchionne encabezó la compra de Chrysler, después de que el gobierno de Estados Unidos la saneó financieramente con un paquete que incluyó a GM, que costó 13 mil millones de dólares. Lo importante es que Marchionne le dio rombo a una fusión que muchos calificaron como mala. Hizo retornar las utilidades y dio una dimensión global a Jeep, una marca que antes era desconocida y hoy fue imagen diaria en el Mundial de Futbol y en la Copa de Campeones Europeas con el Milan.