Autor: JULIO MARCELO BRITO ALVISO | 18/07/2018
Ford aceptó pagar casi 300 millones de dólares a los propietarios de vehículos afectados por las bolsas de aire defectuosas del proveedor japonés Takata, asociados con alrededor de 20 muertes en el mundo, según informes. El acuerdo judicial. está sujeto aún a la aprobación de la corte.
En la demanda, los propietarios afectados sostienen que el valor de sus vehículos disminuyó porque Ford usó los airbags de Takata, que han causado la muerte de al menos 20 personas y centenares de heridos debido a su explosión en el momento de inflarse.
El escándalo de los airbags de Takata, que ha provocado la quiebra de la compañía, se inició en 2008 cuando varios fabricantes de automóviles empezaron a hacer llamadas a revisión para reparar los airbags que explotaban en el momento de su activación.
Según el acuerdo alcanzado por Ford, los propietarios podrán acceder a un reembolso máximo de 500 dólares por gastos documentados y obtener automóviles de alquiler mientras se reparan los suyos.
El acuerdo se alcanzó tras varias semanas de negociaciones y no resuelve las reclamaciones de daños personales ni materiales.
“La seguridad es nuestra prioridad. Seguimos centrados en trabajar con nuestros clientes para conseguir reparar sus vehículos”, aseguró el fabricante.